lunes, 4 de abril de 2016

El priómano, Superman y tres pobres diablos

¡Vaya Wrestlemania, señores! Una noche para el recuerdo. A más de uno le va a costar mucho olvidar lo que vimos hace unas horas en el "Showcase of the Inmortals". Antes de nada, no quiero acusar a nadie de lo sucedido anoche, pero el señor (ahora hall of famer) Snoop Dogg estaba presente en el AT&T Stadium de Dallas, Texas, y creo que montó una fiesta muy entretenida en backstage, repleta de "polvos mágicos".

Quiero analizar íntegramente Wrestlemania 32, porque es digno de ser comentado. Y esto no es ironía. Digamos que ha sido un buen evento de entretenimiento, carente de lógica en cuanto a wrestling y bookeo, pero sorprendentemente entretenido con todo lo que hicieron, y los "Wrestlemania moments" que aparecerán en los libros de historia. Pero para eso necesito tiempo, ¡dadme tiempo!, no obstante, no quería que pasara un largo periodo de tiempo desde que vi el segmento más "WTF" (o como diría un español: ¿qué coño estoy viendo?) de la historia de Wrestlemania. No sé si sois consientes , pero... ¡Presenciamos historia! Sencillamente, smoke weed everyday. ¡Perdón! No quería decir eso, ha sido un error. No sé en qué estaba pensando (eso mismo decía yo anoche mientras veía el segmento).

Supongo que por el título ya sabéis a quienes me refiero, y de que segmento voy a hablar. Antes de analizarlo, tenemos que recordar que el show iba mal de tiempo, supuestamente deberíamos haber estado en la última media hora de Wrestlemania. Con este segmento alcanzamos la cuarta hora de espectáculo (sexta si contamos las dos horas de pre show), y aún quedaba la lucha por el título mundial. El evento se terminó alargando aproximadamente cincuenta minutos más. Por último, os pongo en situación: tres y media de la madrugada. Creo que esto es suficiente.

Las animadoras del equipo de los Dallas Cowboys salen a interpretar un baile, sí, el típico que se ven en los descansos de los partidos de fútbol americano y baloncesto. Acto seguido cuando todas las chicas están abiertas en el suelo, estalla la música de entrada de The Rock. Pero claro, esto es Wrestlemania, y tiene que haber algún tipo de entrada especial, ¡y entra con un lanzallamas! Se vuelve loco encendiendo el lanzallamas por la escenografía del estadio, hasta que llega a donde hay unas letras metálicas que ponen "Rock" y las prende en llamas... Llega al ring y dice que es momento de hacer el gran anuncio que tanto ha promocionado por las redes sociales. Agradece a los fans el apoyo que siempre ha recibido y les dice que sin ellos no podrían estar haciendo historia. Anuncia que la asistencia a Wrestlemania 32 es de 101.763 espectadores, y es en este momento en el que digo: ¿Este es el gran anuncio?¿Hace falta que venga The Rock para que diga el aforo? ¡Se apagan las luces y los Wyatt empiezan a descender la rampa! En este momento estoy tenso, es posible que inicien una rivalidad o algo por el estilo, pero tras unas cuantas puyas que se tiran Bray Wyatt y The Rock, este último dice que va a hacer historia aquí y ahora. ¡Se arranca el pantalón!... y para sorpresa de todos, lleva su bañador puesto, y reta a cualquier miembro de la familia Wyatt o a todos a la vez si lo desean.

Aquí hay un punto de inflexión importante, es cuando este segmento podía pasar a ser interesante o quedarse en el momento más extraño de Wrestlemania. Optan por la segunda opción, porque el que se enfrenta a The Rock es Erick Rowan en lugar de Bray Wyatt. Suena la campana, rock bottom y cuenta de tres. ¡The Rock ha hecho historia! ¡El combate más corto que se ha visto en Wrestlemania, tan solo 6 segundos! Pero la cosa no termina aquí, Bray Wyatt está enfadado con lo ocurrido y junto a sus hermanos se suben lentamente al ring para destrozar a The Rock...

¡Aparece Superman!, perdón: ¡Aparece John Cena! El héroe americano vuelve después de la lesión de hombro, se sube al ring y junto a The Rock se encargan de los Wyatt. Los Wyatt desaparecen tras recibir una humillación pública (y vaya si es pública: habían 101.763 personas allí delante). El segmento finaliza con The Rock y John Cena celebrando no sé exactamente qué. ¿El haber enterrado a los Wyatt después de que hicieran un gran trabajo a lo largo de 2015?

Con cada cosa que veía me iba quedando más atónito y me iba preguntando qué estaba viendo. Y mejor tomármelo con humor, porque si solo me centro en la humillación que recibió la familia Wyatt...


Sin duda alguna, para mi este ha sido el momento más sin sentido que he visto en Wrestlemania. Divertido cuanto menos. Es gracioso, porque la WWE hizo honor a su nombre, y explotó más que nunca esa "E".

No hay comentarios:

Publicar un comentario